jueves, 12 de marzo de 2015

Título esperanzador

La hoja afortunada que roza tu cuero,
No es más que un silencio que te vacía
A la cual regalas tus otoños,
Mientras yo recuerdo tus alegrías

No termina de manifestarse
El contacto de mi polo con tu ira,
Saltan chispas por un burdel
Como si fuera una canción de Sabina 

Y te envío postales de Roma 
Aunque sé que no las miras,
Por no ver cómo se desploma
mi cuerpo empujado por las minas 

Ella ríe mientras tú no lloras,
La magia que esgrime
Te acorta las horas,
Intuyo tus paso por el corredor de miras

Acabando con lo inerte, 
Presente, pasado y mentiras
Tú, tu inexistencia armoniosa
Ella, su figura y guillotina


domingo, 8 de marzo de 2015

Todo sobre mi enemigo

Calma mis gritos, quémame en silencio 
Ahuyenta mis latidos, corta con mis miedos

Mi sangre se derrite, aumenta tu recelo
Las venas no se esconden, intuyen su sendero

Dile al llanto que no grite, 
Háblame de los extremos, 
Mis dos cristales mojados 
Conmemoran tus lamentos 

Con el filo de mi diente, saco la inerte crueldad 
Y afilo su tenue, fina y recta maldad
La incisión que me provoca no supera la realidad 

Son tus puntadas las que me matan
Atormentadas en su inmensidad